Gafas graduadas ojo de gato
Un imprescindible en el mundo de las gafas, las gafas graduadas de ojo gato han definido el diseño óptico durante 9 décadas y parece que van a continuar haciéndolo. Aunque se parecen al estilo de los 50 y se caracterizan por el espíritu Mad Men, las gafas de ojo de gato se imaginaron por primera vez en los años 30. La cineasta americana Altina Schinasi consideraba que a las ópticas les faltaban monturas que favorecieran a las mujeres, por lo que ella misma se puso a diseñarlas. A partir de los años 30, se hicieron famosas gracias a numerosas estrellas que las llevaron: Marilyn Monroe, Jackie Kennedy, Audrey Hepburn; todas fueron pioneras con la forma de la montura y a todas se les idolatró por su estilo. Actualmente, todos los diseñadores de gafas, desde las marcas de moda lujosas hasta las marcas pequeñas independientes, le dan su giro a este clásico para asegurarse de que sean actuales. El modelo SL 244 de Saint Laurent con su montura blanca excesivamente arqueada y puntiaguda y las patillas contrastando en negro es el ejemplo perfecto de ello. Esta parte alargada de las gafas graduadas de ojo de gato es precisamente la que las hace la solución perfecta para los que tengan la cara en forma de diamante, ya que equilibra cualquier redondez.